Secuelas, secuelas…secuelas

Cuando yo era una niña; no digo que cuando era pequeña, seamos realistas sigo siendo pequeña, mi abuelita solía leernos cuentos y contarnos cuentos; bueno los últimos eran más bien historias de espantos con todo el folclore asociado, que terminaban con un final feliz. También me toco ver las películas de princesas, sí yo toda ruda, me refile a todas las princesas de Disney.

Lo que tenían en común todas estas historias era el final. “Y vivieron felices para siempre” “Final”

En mi época no existían las precuelas, ni las secuelas. Ni en los libros ni en las películas. Terminabas el libro o se acabó la película y tan tan. No se sí, en esa época la vida era más simple o será que era yo muy joven como para ponerme a pensar que fue de las princesas después del final de la película.

-No es como, que me preocupara saber si la Cenicienta se convirtió en la Reina Consorte y tuvo deberes de primera dama. Jamás me cuestione si Blanca Nieves se convirtió en reina y exploto las minas de los enanos para mejorar la economía del país. El final quedaba abierto a la imaginación y mi imaginación se apagaba junto con la televisión.

Al final de la tarde, eran solo películas y cuentos. Nada que ver con la realidad del día a día y como decía mi abuelita:

– Lo que sale en la tele es mentira, excepto por las noticias y los documentales.

Así que no había necesidad de preocuparme por lo que pasaba después del final feliz.

Claro que existían excepciones a estas historias de una sola exhibición. Pero en estas excepciones cada libro y cada película era una aventura diferente, solo los personajes principales se repetían. Por ejemplo: Indiana Jones, Rocky, Terminator, Duro de Matar y por supuesto la Guerra de las Galaxias.

Todas y cada una de las películas en episodios, las vi. Es más, confieso, sin pudor alguno, que algunas de estas colecciones las tengo en VHS, DVD y Blu-ray. Después de todo yo no tengo la culpa que la tecnología evolucione y hay esenciales sin los que no puedo vivir.

Sin embargo, esto de las secuelas, precuelas ya no está gustando nada. La tele se está llenado de “reuniones” de viejos programas por ejemplo la reunión de Friends o de Sex & de City (ahora llamada “Just like that”). Cuyas tramas en algunos momentos me parecen forzadas, hechas solo para reflejar la revolución que vive el mundo, hoy en día.

Parece que esta tendencia, es una mera necesidad chismosa de saber que pasó después del “Final”. Ah, porque somos bien chismosos y nos gusta saber que pasó.

– Como si ya no vendiera el 5to intento de las maquinas por acabar con John Connor para que la revolución de las maquinas tenga éxito. Obvio, fuimos a ver la película en el cine.

Algunos me van a decir que no todo empezó con Indiana Jones y la Calavera de Cristal. Donde vemos, al ya no tan guapo Harrison Ford, en una nueva aventura de Indiana acompañado de su hijo. Sino que empezó con las películas de “Star Wars” cuando llevaron al cine la historia previa a la a las primeras tres películas, que por cierto ví el día del estreno en el cine.

Pero hasta allí estábamos bien. Nadie me puede negar que en general fueron buenas las historias con momentos icónicos. Como cuando respira por primera vez Dark Vader bajo su mascara.

 – A quien no se le haya puesto la carne de gallina con esa escena está muerto o no entendió la importancia del momento.

Me queda claro que asistir a ver estas películas solo alentó a la gente de Hollywood a hacer más secuelas. Pero creo que ya se están pasando de tono este fenómeno solo para darle continuidad a las historias y obviamente ganar una lana.

No me dejaran mentir, pero que necesidad había de que las ultimas 3 películas de Star Wars. Casi me desmayo cuando Kylo Ren mata a Han Solo, emulado la muerte de Darth Vader a manos de Luke Skywalker. Las películas están llenas de escenas que hacen referencia a las películas originales, pero con una nueva generación de actores. Yo diría que estas películas son un corolario para cerrar la historia con tintes modernos.

Luego trajeron de vuelta a Rocky para “defender su título” de icono del boxeo, una buena película. Solo para que, en su siguiente aparición, darle cáncer (en la película de Creed) todo para crear una nueva franquicia a tono. – ¿Porque quieren que se muera este personaje? Todos amamos a Rocky.

Para rematar revivieron a Neo para una cuarta película de Matrix, pero le borraron la memoria y se aventaron una trama muy rebuscada. Otra película que no me hizo nada feliz. Eso sí, las secuencias de acción valen la pena.

Menos mal que no se les ha ocurrido hacer otra película de “El Padrino”, porque ya sería el colmo.

-Pero la secuela que me tiene tirada al piso es Jame Bond. ¡¡Porque eso es la última película, una secuela innecesaria!!

Tuve que ver dos veces la última película de 007, “No time to die”, porque la primera vez me dejo en tal shock la muerte de Bond que no recodaba bien la historia. Especialmente porque el hilo conductor de esta película no es Bond si no su interés romántico de la película anterior. -Si están haciendo cara de !!ósea¡¡¿cómo?!, estamos iguales-

– Así es señores, tuve que ver “No time to die” dos veces para ver si entendí el final. Tengo que decirlo el final de la película me tiene traumada y decepcionada. Por favor es James Bond, el más icónico de todos los espías. ¿Lo tenían que matar sosteniendo el peluche de su hija; que por cierto no sabía que tenía? Esta fue la gota que derramo el vaso. Estos de las secuelas ya me cayó mal.

¿Porque hacen eso? El final de la película anterior fue bastante cursi. Él había escogido el retiro de la mano de su amor. ¡Que hay más querían!  El amor ganó sobre la violencia. Hasta allí la hubieran dejado. ¡Pero, NO! hicieron una secuela.

A ver han hecho 25 películas basadas en el personaje de una novela. Independientemente de quien interpretara al personaje; el 007, Bond, James Bond, todos lograron mantener la esencia de este. Todas las películas me atraparon, amo al personaje que al final siempre vencía al mal. Aunque no siempre o más bien casi nunca se quedaba con el interés romántico, pero salía triunfante.

El personaje y las historias evolucionaron con la época, como para darle realismo. Ver a Pierce Brossman hacer un 007 que se despeinó en una pelea fue un evento. Porque Bond, no perdía el estilo ni en medio de la lucha cuerpo a cuerpo. Los gadgets de los villanos y de los buenos también avanzaron con la época, sin dejar fuera elementos clave como el Aston Martin. Sin embargo, el último paso evolutivo de la historia fue demasiado…al menos para mí.

– ¿Qué onda con la 007 femenina? ¡007 es un hombre así fue ideado en la novela!  No tengo nada en contra de la escultura de mujer que pusieron como el agente 007 pero… ¿Acaso el MI5 no podía retirar el numero como lo hacen los equipos deportivos? ¿Tenían que darle el puesto a una mujer solo para estar a tono con los tiempos?

Antes de que se me arranquen, no me ofende que hayan puesto a una mujer como 007, es solo que en la historia (ficticia) original es sobre un espía masculino. -Así que por favor respeten al personaje o de menos al autor original. Es más, estoy segura de que Ian Fleming dio vueltas en su tumba cuando filmaron las escenas de la 007.

Yo sé que esta super IN, la inclusión, entiendo la necesidad de la industria cinematográfica de sumarse al movimiento, pero 007 ya era una historia feminista. No había necesidad de cambiarle el género al personaje.

Sí, 007 el James Bond; el espía seductor, es una película feminista. Aunque por allí (o se en las redes) hubo un intento por cancelar al 007 por ser considerada una película machista.

-La realidad es; en mi opinión, que 007 es feminista. Ay les van mis razones, tras esta audaz afirmación:

1) La jefa de James Bond es “M”. Una mujer a cargo de la mayor organización ultrasecreta de espionaje del Reino Unido (según la novela), excepto en la última película porque en la anterior murió “M” y su sucesor es un hombre.

2) Money Penny, es la mano derecha de “M”. Tal vez sea un personaje secundario, pero es importante en la historia por ser cómplice de Bond.

3) Las chicas Bond. Las chicas Bond no solo son un accesorio vistoso en la película. Todas ellas mujeres guapisisisismas, tiene un rol importante en la historia. Las que son del bando de Bond son instrumentales para el éxito de la misión. Las villanas, se miden al tu por tu con Bond, cada una con sus armas y artimañas para hacerlo caer. Las únicas que salen mal paradas son el interés romántico del 007, casi siempre las mata el villano.

En general las mujeres en las películas están a la altura de Bond. Son sus iguales en la lucha contra los malos o en contra de él.  Son mujeres que se miden de igual a igual con el mejor espía del mundo, tal como el feminismo lo defiende. Por si se les olvido el feminismo busca la igualdad entre los géneros y las personas.

– Y no me importa lo que digan las feministas extremas, Bond es una franquicia feminista.

Aun así, decidieron terminar la historia con un cliché romántico. El del héroe que sacrifica su vida por los que ama y por el mundo. ¡Además, sosteniendo un conejo de peluche!

No voy a decir que este final arruino las otras 24 películas, pero… ¡Chale!

Lo único que me falta es que, en la nueva película de Top Gun, maten Maverick. Eso ya sería demasiado o peor tantito que hagan una secuela de “Duro de Matar” y maten al Macklein.

– Así que Tom Cruise, espero que no me decepciones. Tengo mi fe cinematográfica puesta en tu secuela de Top Gun.

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Su formación profesional es en el área de las ciencias para la salud. Con 4 décadas de vida es una ciudadana más del planeta, irreverente, sin filtro boca cerebro y opinóloga profesional. Que nos comparte sus ideas.

3 Comments

  • Rene
    3 años ago

    Son pocas las secuelas (o precuelas) que están a la par de las originales, pero explotan nuestra nostalgia que tenemos hacia esas historias y esos personajes que, por más que nos quejemos, somos quienes los consumimos quienes no los dejamos morir. Entender la industria del entretenimiento como lo que es, una industria económica y no como los guardianes de nuestros recuerdos más preciaso hace que se levante el velo de los motivos detrás de estos nuevos productos, que claramente no están dirigidos para nosotros, pero que inevitablemente recibimos porque hay que decirlo: nuestra nostalgia es redituable.

    • Ma. Esther
      3 años ago

      Me encanta toda la presentación!, Claro, además de ver las películas hay que recordar las condiciones sociales de la época en que se hicieron. Algo muy importante es que se respeten las obras originales. Si quieren cambiar las ideas originales, escriban algo nuevo. Pero desafortunadamente ya no aparecen nuevos talentos.

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